Soy amigo del Intendente: «hago lo que quiero»

Esto parece ser lo que piensan alguno protegidos del poder, “estaciono donde quiero», me burlo de las normas legales y de convivencia.

En una comunidad organizada estas cosas no tendrían que pasar pero cuando uno es amigo del poder, las multas terminan rotas en algún tacho de basura. Más aun, los mismos inspectores ya tienen miedo de infraccionar a estos sujetos ya que no solo las multas no llegan a donde tienen que llegar, si no que además los retan.

Mas de una vez, por no decir casi todos los días, estos gusanos de la sociedad  son multados , pero por alguna razón obvia se burlan de las normas con total impunidad.