Prevenir incendios en la primera ola de calor de la temporada

Los días lunes 6 y martes 7 se darán condiciones climáticas que podrían propiciar un incendio rural o de interfase si se llegara a generar un foco de fuego: vientos secos de más de 30 kilómetros por hora, temperaturas mayores a los 30 grados centígrados y una humedad relativa del ambiente de menos del 30 por ciento: lo que se conoce como “Regla de los 30”.

Las medidas preventivas a tomar son todas las que tiendan a reducir a cero la presencia de fuego en espacios exteriores, al aire libre: quema de basura y restos de desmalezamiento o poda; colillas arrojadas al ambiente; desmonte a fuego; asados y cocina al aire libre; trabajo con amoladoras o soldadoras en áreas con presencia de pastizales secos.

El mayor riesgo está dado en dar origen a estos focos ígneos sin tener en cuenta lo seco de la vegetación cercana y los frentes de viento que habitualmente se producen repentinamente en nuestra región, y hacen que estos fuegos se salgan de control convirtiéndose así en incendios de grandes proporciones.

Estas medidas deberán observarse durante toda la temporada de verano en la que el riesgo de incendios rurales o de interfase en la zona de la costa, o forestales en la cordillera aumenta considerablemente. Además, tomando en cuenta que la gran mayoría de estos eventos se producen por causas humanas.